Una práctica de Marketing que, por medio de la gestión de contenido de calidad, construye el objetivo de posicionamiento de las marcas. Sí, estamos hablando del Branded Content, la herramienta clave que, hoy en día, muchas marcas implementan, con el fin de aumentar la recordación, mejorar su engagement, ampliar su alcance y reconectar con su target.
Definiendo Branded Content
Pero ¿en qué consiste realmente esta práctica? Las empresas la utilizan para, a través de sus publicidades, darle el foco al valor, para que, a través de este, se conozca el verdadero sentido de su imagen: su esencia.
¿Cuál es el objeto del Branded Content?
El enfoque, en efecto, ya no está en los productos que puedan ofrecer (o en los servicios que ponen a disposición del usuario), sino en las experiencias que se pueden adquirir a través de estos. ¿Cómo? Por medio de storytellings de alto impacto, ideales para generar esa suerte de conexión emocional entre marca y consumidor, siempre tan anhelada.
La idea consiste en hacer que el espectador, potencial consumidor o usuario, perciba la publicidad no como tal, no como aquella cuyo principal objetivo es la venta, sino -a través de la subjetividad- como una historia que cuenta por qué tal marca es tan valiosa.
¿Qué ventajas trae implementar el Branded Content en la estrategia de marca?
- El contenido permite que el espectador se concentre en la historia y la emoción que la misma le genera.
- Se mejora la recordación de marca, al asociarla no con un producto o servicio como tal, sino con una emoción.
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